ERISIPELA
¿Qué es?
Consiste en un padecimiento infeccioso agudo dermoepidémico y
del tejido subcutáneo, rápidamente progresivo; además, es
considerado como un tipo de celulitis que afecta a lactantes,
niños pequeños y ancianos.
¿Qué la ocasiona?
Una infección por estreptococos beta hemolítico, que puede
entrar por cualquier alteración de la piel.
Dentro de los factores de riesgo se encuentran:
·
Un corte en la piel
·
Problemas con el drenaje a través de las venas o el sistema
linfático
·
Úlceras cutáneas
En
el pasado, la cara era el sitio de infección más común, pero
ahora representa sólo alrededor del 20% de los casos. Las
piernas resultan afectadas en el 80% de los casos.
Síntomas
Lo
más frecuentes es la aparición de:
·
Ampollas enrojecidas con inflamación y calor de la zona.
·
Fiebre, temblores y escalofríos. (No siempre).
Diagnóstico y tratamiento
El
diagnóstico de la erisipela se basa en la apariencia de la piel
y generalmente no se necesita una biopsia.
La principal terapia es el tratamiento con antibióticos como la
penicilina, los cuales dependiendo la gravedad del cuadro, se
pueden suministrar por vía intravenosa y en casos menos graves,
puede ser suficiente la vía oral.
Se
pueden necesitar antibióticos por períodos prolongados en
individuos que padecen episodios repetitivos de erisipela.
Posibles complicaciones
El
pronóstico de los casos de erisipela suele ser bueno una vez
recibido el tratamiento adecuado, tardando algunas semanas en
recuperarse por completo. Ciertos pacientes pueden presentar
complicaciones debidas a la infección. Cuando ésta no es atacada
adecuadamente y a tiempo, las bacterias pueden internarse hacia
la sangre y ocasionar bacteriemia, pudiendo viajar hacia las
articulaciones, corazón o huesos, donde pueden generar
complicaciones más severas e incluso la muerte debida a un shock
séptico. Estos casos deberán ser manejados en medio hospitalario
con la infraestructura adecuada para su óptima atención.
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